Mascarillas para la rosacea de sabila, avena y crema lechuga rosacea (cuperosis)

Crema lechuga rosacea La cuperosis o couperosis (llamado también acné rosácea) consiste en una alteración de los capilares de la piel, en especial localizadas en los pómulos, nariz, mejillas y lóbulos de las orejas, en la que aparecen zonas rojas con venitas dilatadas.

Su origen es desconocido, pero pareciera estar relacionado con factores genéticos, el debilitamiento de la piel, cambios bruscos de temperatura o problemas circulatorios (uso de gafas apretadas o tensión arterial elevada entre otros).

Más que un problema de salud, la cuperosis o acné rosáceo se considerado un problema de belleza sobre todo en los casos severos cuando las venas cutáneas adquiere un aspecto violáceo que desluce la piel del rostro.

A continuación una serie de mascarillas naturales para la rosacea, crema lechuga rosacea y cuperosis tratamiento casero que se pueden emplear para mejorarla:

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Recetas de mascarillas para la rosacea

Mascarilla de hojas de llantén para la rosácea

Ingredientes

1 cucharada de hojas secas de llantén

Modo de aplicación

Añadir las hojas de llantén a medio litro de agua hirviendo. Dejar reposar por 10 minutos hasta que se enfríe ligeramente.

Posteriormente, colar y, medianteuna gasa, aplicar sobre las áreas afectadas por la cuperosis. Repetir a diario hasta que se logre una mejoría.

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Mascarilla de sabila para la rosacea

Esta mascarilla es indicada para la cuperosis no muy marcada o de reciente aparición.

Ingredientes

100 gramos de agua de rosas

100 gramos de gel de aloe vera o sábila

Modo de aplicación

Mezclar el agua de rosas y la sabila. Aplicar mañana y noche en las zonas afectadas.

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Mascarilla de avena para la rosácea

El hamamelis es una planta que tiene propiedades vasoconstrictoras, astringentes y calmantes lo cual resulta ideal para las personas con acné rosácea o cuperosis

Ingredientes

1 cucharada de hamamelis

1 cucharada de crema de avena

100 el de aceite de almendras dulces.

Modo de aplicación

Machacar en un mortero las hojas de hamamelis y colocarlas en un recipiente. Agregar el aceite de almendras dulces y la crema de avena y dejar macerar durante toda la noche.

A la mañana siguiente, calentar el aceite al baño María durante 30 minutos y fíltralo. Verter el aceite en un frasco de cristal opaco. Aplicar esta preparación sobre las zonas con cuperosis 2 veces al día, mañana y noche.

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Receta de crema lechuga rosacea

Al contener grandes cantidades de vitamina C, la lechuga y las uvas pueden ayudar a la piel a mejorar su vitalidad.  Aquí la receta de crema lechuga rosacea

Crema lechuga rosacea

Ingredientes

1 puñado de hojas de lechuga

1 puñado de uvas

Modo de aplicación

Licuar las hojas de lechuga y las uvas hasta que quede como una crema y aplicar sobre las áreas afectadas por la cuperosis para reducir la inflamación.

Usar diariamente para lograr una mejoría. Con el fin de prevenir la aparición de la rosácea, puede emplearse esta misma mascarilla un par de veces por semana.

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Cuperosis tratamiento casero

Consumir alimentos como los siguientes:

• Arándanos Ejercen un efecto antiinflamatorio y protegen y fortalecen las paredes de los vasos capilares y venosos. Por ello mejoran la circulación sanguínea y la cuperosis.
• Uvas negras Son ricas en antocianos, flavonoides y resveratrol, compuestos fitoquímicos de potente acción antioxidante. Comerlas habitualmente te ayuda a fortalecer las paredes venosas.
• Naranja, limón, mandarina, pomelo, bróculi, acelgas, pimiento verde, perejil, etc. Estas son frutas ricas en vitamina C que ayudan a la piel a combatir la rosácea.

Evitar exponerse al sol sin protección Quienes tienen rosácea saben muy bien que no pueden permanecer mucho tiempo en ambientes calurosos con alta exposición al sol. Situaciones como estas dejan la región facial del paciente enrojecida y ardiente debido al aumento de la temperatura corporal. Lo que ocurre en este proceso es la vasodilatación como un intento de autodefensa para suavizar el calor en esa región. Por otro lado, el efecto de esta intervención es un rostro rojizo y ardiente.

Evitar comer comidas muy calientes Beber una taza de café por la mañana o comer una sopa muy caliente para la cena puede no ser una buena idea para las personas con rosácea. Los alimentos y bebidas calientes hacen que la piel del paciente se enrojezca y parezca irritada. Así que no tenga prisa por disfrutar de su comida. Espere un poco hasta que alcance la temperatura cálida antes de comer.

Evitar comer alimentos picantes Aunque la pimienta proporciona una serie de beneficios para el cuerpo, puede ser un villano para quienes padecen rosácea. Cuando las personas con esta característica de la piel comen alimentos picantes y muy picantes, tienen diversas reacciones, desde enrojecimiento y ardor hasta sudoración intensa en la cara.

Evitar consumir bebidas alcohólicas El alcohol causa una serie de daños en la piel, incluida la dilatación de los vasos sanguíneos, lo que provoca enrojecimiento y sensación de ardor. Esto sucede en todas las personas, sin embargo, es más evidente en quienes tienen rosácea.

Usar un mínimo de cremas contra arrugas. Si padece cuperosis y quiere usar una crema contra arrugas que contenga ácidos alfa hidróxicos para prevenirlas, lo mejor es irse con cuidado.

Leer las etiquetas del producto minuciosamente y sólo compre la que contenga un porcentaje de ácido de menos de 2.5 por ciento. Si las instrucciones del empaque indican que debe ponérsela dos veces al día, no se acelere creyendo en recetas milagrosas. Úsela una vez al día, máximo. Si se presenta cualquier enrojecimiento, suspéndala.

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